| 28 | | La expansión del uso de Internet en las últimas décadas se ha traducido en que, de forma medianamente encubierta, la infraestructura y los servicios de la red se encuentran bajo control directo de actores económicos y gubernamentales vinculados geopolíticamente a bloques de poder que poseen una actitud de subordinación hacia Latinoamérica. Un estudio de la ubicación de los servidores y de las redes de fibra dará cuenta rápidamente de que la infraestructura de Internet se encuentra en la esfera de influencia de los países del Norte global [#point2 (2)]. Adicionalmente, los servicios de comunicaciones más populares son, a su vez, propiedad de empresas cuyo modelo de negocios tiende al monopolio y, por tanto, se orienta hacia el establecimiento de servicios centralizados. Las políticas de telecomunicaciones en América Latina, orientadas en muchos casos hacia la contratación - pública - de capital privado para garantizar el acceso a Internet de la población, tiene efectos que no han escapado de la lógica empresarial de considerar Internet como un negocio. Como resultado, la tendencia es que los usuarios latinoamericanos, cada vez más, son captados por contenidos y aplicaciones foráneas, servicios centralizados, y prestaciones que se encuentran soportadas por infraestructura controlada por centros económicos y de poder del mundo industrializado. |
| | 28 | La expansión del uso de Internet en las últimas décadas se ha traducido en que, de forma medianamente encubierta, la infraestructura y los servicios de la red se encuentran bajo control directo de actores económicos y gubernamentales vinculados geopolíticamente a bloques de poder que poseen una actitud de subordinación hacia Latinoamérica [#point4 (4)]. Un estudio de la ubicación de los servidores y de las redes de fibra dará cuenta rápidamente de que la infraestructura de Internet se encuentra en la esfera de influencia de los países del Norte global [#point5 (5)]. Adicionalmente, los servicios de comunicaciones más populares son, a su vez, propiedad de empresas cuyo modelo de negocios tiende al monopolio y, por tanto, se orienta hacia el establecimiento de servicios centralizados. Las políticas de telecomunicaciones en América Latina, orientadas en muchos casos hacia la contratación de capital privado para garantizar el acceso a Internet de la población, tiene efectos que no han escapado de la lógica de considerar Internet como un negocio. Como resultado, la tendencia es que los usuarios latinoamericanos, cada vez más, son captados por contenidos y aplicaciones foráneas, servicios centralizados, y prestaciones que se encuentran soportadas por infraestructura controlada por centros económicos y de poder del mundo industrializado. |
